El puerto danés de Orsted se desploma en bolsa después de que Trump detuviera un parque eólico marino.

El precio de las acciones del gigante de las energías renovables cayó un 19% en Copenhague el lunes 25 de agosto, cuando la administración estadounidense decidió detener la construcción de Revolution Wind en la costa noreste de Estados Unidos en vísperas del fin de semana.
¿Podrá Orsted superar este importante revés? Las acciones del gigante danés de la energía eólica cayeron un 19 % en la Bolsa de Copenhague el lunes 25 de septiembre, alcanzando su nivel más bajo histórico, después de que la administración del presidente Donald Trump ordenara [el viernes 22 de agosto] la suspensión de la construcción de un parque eólico marino casi terminado en la costa noreste de Estados Unidos, según informa Bloomberg .
El grupo intentó tranquilizar a los inversores afirmando tener la situación bajo control, continúa el medio económico estadounidense. Pero la interrupción del proyecto Revolution Wind, cuya construcción costó 4.000 millones de dólares [3.400 millones de euros], es la última de una serie de malas noticias para Orsted.
El proyecto de sesenta y cinco aerogeneradores frente a la costa de Rhode Island "había recibido todas las aprobaciones necesarias de la administración Biden, y casi el 70 % de los aerogeneradores ya se habían instalado", informó The New York Times . Revolution Wind estaba "en camino de producir suficiente electricidad para abastecer a más de 350.000 hogares para la próxima primavera".
La carta de la Oficina de Gestión de Energía Oceánica de la administración Trump exige que la empresa suspenda todas las actividades en curso en el sitio, sin especificar los motivos, según continúa el periódico neoyorquino. La compañía energética danesa está considerando posibles acciones legales, pero pretende continuar completando el proyecto para el próximo año.
Por el contrario, los mercados creen que el sector industrial se hunde aún más en la crisis. La semana pasada, Orsted buscó recaudar 9.400 millones de dólares adicionales [8.000 millones de euros] para mantener a flote Revolution Wind y Sunrise Wind, otro enorme parque eólico marino cerca de Long Island, mientras que la oposición del presidente Trump a la energía eólica está agravando la desaceleración del sector.
De hecho, «esta es la segunda vez que la administración Trump interviene en un gran proyecto eólico marino», señala el Financial Times . En abril, Washington suspendió, antes de aprobar, el proyecto Empire Wind, de 5.000 millones de dólares (4.300 millones de euros), de la firma noruega Equinor.
Este último revés tendrá un "enorme efecto disuasorio" en todas las energías renovables, según el Consejo Mundial de la Energía. Un portavoz de la principal organización del sector declaró al diario británico: "Este tipo de cosas ocurren en países en desarrollo. En cambio, están sucediendo en lo que se supone es el bastión del mundo libre. No es grave".
Courrier International