“Los clientes quieren simplicidad, no eligen solo por el precio”

MILÁN – A juzgar por los precios, el mercado libre no se compara con el mercado protegido. Pero para Giorgio Tomassetti, director ejecutivo de Octopus Energy Italia, la comparación solo resalta una parte de la narrativa, pasando por alto lo que realmente importa a los consumidores.
Los datos de Arera arrojan un balance muy negativo del libre mercado. ¿Qué falla?
En nuestra opinión, la narrativa del mercado protegido es un fin en sí misma, residual en el panorama general, ya que representa solo al 20% de los clientes. La mayoría de los italianos eligen el mercado libre y, al analizar las cifras, debemos tener esto en cuenta.
Sin embargo, los consumidores siguen quejándose del alto coste de la energía...
La situación no es halagüeña y, por ello, se necesitan intervenciones estructurales. Medidas como el decreto Bollette son útiles a corto plazo, pero no resuelven el problema.
En 2024, los impuestos, cargos y aranceles serán la principal carga de tu factura.
Cierto. Los gastos que no tienen nada que ver con la energía, como la tarifa, en nuestra opinión no deberían estar en la factura. El transporte, en cambio, es un gasto necesario, pero Arera nunca ha garantizado su precio.
A partir del 1 de julio, el proyecto de ley adoptará un formato diferente. ¿Qué opinas de la nueva versión?
Parte de una premisa errónea: el cliente no busca mayor transparencia, sino simplificación. La nueva factura, en cambio, solo añade más información que al consumidor menos experimentado le resulta difícil comprender. Por lo tanto, nuestra opinión es negativa.
La autoridad ofrece su propio portal para navegar entre las ofertas.
Sí, pero solo permite una evaluación basada en el precio, mientras que hoy en día las familias también se fijan en la calidad del servicio y la experiencia de amigos o conocidos. Al final, el operador que eligen es un equilibrio entre varias variables, no solo el más barato.
Las concesiones eléctricas expirarán pronto y Arera considera apropiado minimizar, si no eliminar, el impacto de la carga de remodulación en los consumidores.
Si las concesiones se licitaran, se obtendría el resultado más eficiente. Hoy en día, en Italia, el primer operador tiene más del 40% del mercado, por lo que aún no puede considerarse competitivo.
La Repubblica